viernes, 6 de mayo de 2022

GORILA. MACHO ESPALDA PLATEADA

 Este mi pictocaligrama, que incluye mi diseño y en el cuerpo de la figura de este primate e innegable pariente nuestro, mi poema, pertenece a la serie animales salvajes. 

Basta con mirar la mirada inteligente y claramente humana, su rostro próximo a un humano de piel negra y procedencia subsahariana, sus orejas, su tórax y relación con las caderas, sus brazos musculosos y sus piernas, aunque, inversamente a nosotros, tengan más largos los primeros que los segundos, y las manos prensoras y con el dedo gordo oponible, aunque ellos sean cuadrúmanos, para descubrir su innegable parentesco con la especie humana.

Si en la imagen, realista, ya se nos muestran claros tales aspectos, mi poema, claramente descriptivo en lo físico como en lo caracterológico ya nos deja claros tales aspectos y relaciones como su presencia imponente de forzudo intimidante.

A nivel de proceso, dejaré claro que un pictocaligrama es un dibujo, realista y figurativo, en este caso, 


como aquí puede verse (mi dibujo), en el que se inscribe un poema en relación con la imagen que simboliza y describe, mi poema, que es el que da la imagen definitiva. Esta, en este caso:


Amén de las letras del poema, incluidas, en esta imagen, en las zonas de sombra o en las de pelaje o piel más oscura, en el pictocaligrama, como en el pictograma caligramático, se añade a la imagen más sombreado para dar más verismo a la imagen. Si con todo las palabras escritas, algunas o todas con claramente visibles, será un pictocaligrama, mientras que si el camuflaje es tal que solo una atenta mirada descubre el poema, será un pictograma caligramático (en el caligrama puro, las letras no solo son visibles sino que son las que conforman la imagen).

Sea como fuera todos ellos son poesía visual y todos ellos incluyen un poema e imagen y poema suponen una fusión simbólico-estético de carácter lírico. Y en todos ellos, el poema está en relación directa y de significado con la imagen, de la que es complementaria (y en algunos casos puede ser también parcialmente suplementaria).

Este es, pues el caso, y el poema, mi poema reza así:

Rostro de humano pariente africano,
de mirada inteligente, el gorila,
es un forzudo imponente y destila
respeto en la umbría selva inurbana.

Piernas y brazos. columnas rocosas;
tórax amplio y musculoso, de plata;
y esas manos hábiles y prensoras,
cuatro, y tan humanas cual hacendosas.
El macho, con su clan, siempre desata
la prudencia sumisa y temerosa,
clara efigie de lo que es fuerza bruta.
Cualquier animal elude la lucha.
Impresiona su presencia en la disputa,
incluso si su simple voz se escucha.

MANUEL MILLÁN CASCALLÓ




No hay comentarios: