viernes, 5 de abril de 2019

JAMÁS TE DISTE NI TE DARÁS POR VENCIDA

Al fin liberado de un agitado marzo cargado de creación artística, una obligada, como la Presentación de mi poemario Ciudad entre la bruma impertinente, el 23 de marzo en el Safareigs de Cubelles y los cuatro pictocaligramas (pictocaligrama + poema componente), aportación mía a la presentación del grupo CREACUBELLES o CREA, del cual soy componente, en su exposición artística multidisciplinar LlibertArt d'Expressió, el 27 de marzo en la  Sala d'Exposicions del Centre Social Joan Roig i Piera, de Cubelles, eventos de los que daré cumplida crónica en este blog, así como de otros poemas y relatos de libre creación, puedo volver a retomar con más calma la continuidad de las actividades de este... Comenzaré por alternar los caligramas de mi exposición Amigos de Cubelles, con otros caligramas y pictocaligramas, de nueva creación, entre ellos los de la antes citada LlibertArt d'Expressió, y las crónicas de las dos presentaciones mencionadas.

En concreto Jamás te diste ni te darás por vencida, el meridiano pictocaligrama que nos ocupa, es el dedicado a mi amiga sevillana hace tiempo afincada en Vilanova, Patricia, pertenece, claro está a la serie Amigos de Cubelles o el Bastión de la Amistad: Refugio y Paraíso de vivencias.

Participando de la simbología ya referida en el común de los caligramas de la serie. Este paisaje, corresponde como el común de casi todos los paisajes de la serie, a una mujer y muestra una característica diferencial obvia. El poema se separa diametralmente de la imagen en una dicotomía de antítesis que se complementan, suman y fusionan para agigantar su dramatismo... El poema esta en un cielo enfurruñado de galerna cuyo patetismo se sustenta en las letras de gran tamaño y grosor combinadas con el lúgubre sombreado tétrico y nocturnal más intenso cuanto más cercano a la imagen y esta es terrestre y muestra una galerna, un temporal marítimo, un maremoto de olas gigantescas acosando, abrumando, acechando con devorar el recio acantilado que hace de muralla y sobre él, el faro y el hogar del farero (farera en este caso), sobreviviendo a las calamidades de la vida.

El cielo declama un sino de avatares destructivos que componen la vida como si este fuese la voluntad divina de las tempestades presentadas como pruebas que la tierra, roca pura, y ya Patricia ha de soportar... trabajo, padre, marido, sustento, hijos y calamidades varias que han ido lloviendo sobre el hogar, la esposa, madre e hija que lo soporta y la claridad reflexiva que se impone a la tragedia, la vida, representada por el furibundo mar agitado...

No importa cuándo, dónde ni cómo... separación, divorcio, muerte de la madre, padre con Alzhéimer, hijo perezoso... desempleo y jubilación casi alivio, penurias de todo tipo... que ella ha soportado y soporta para salir airosa, y cada vez más, de todos y cada uno de los atolladeros que la caprichosa diosa Fortuna de ha ido acumulando... Casa y mente (faro), con todo han podido... Es el retrato de esta sobresaliente hacedora de pasteles, tartas, dulces... que compensan las amarguras pasadas y presentes...

Pictocaligram y poema ambos míos, quedarán a merced concisa de la retratada, como todos y cada uno.

MANUEL MILLÁN CASCALLÓ 


No hay comentarios: