sábado, 31 de diciembre de 2011

CORAZÓN DE ÁFRICA

El caligrama conjuga el dibujo propiamente dicho, que ocupa el marco de una selva africana talada y quemada parcialmente par ser reutilizada en agricultura de roza, con el caligrama propiamente dicho, que distribuye mi poema por la mujer, negra subsahariana y básicamente enclavada en el corazón de África (básicamente, Ruanda, Burundi, El Congo o Zaire, Uganda, Tanzania y Kenia) que camina bolsa en mano y buena parte de los árboles (todos los enteros y muchos de los talados). Un suelo de cenizas y una bruma de fondo completan el marco, para, en conjunto, imagen y poema, representar el dolor del continente más humillado y expoliado, más pobre y más dolorido (y eso que, desgraciadamente, no es precisamente el único). 

El poema, mi poema, recorre y denuncia, de una forma lírica, pero descarnada y sin tapujos, todos los dolores de África y muy especialmente los del África negra: hambre o hambrunas, sobreexplotación, guerras, desertización, tiranías, abuso de los mercados globales, la herencia colonial, la dependencia abusiva de las metrópolis, la desnaturalización de las culturas autóctonas... y un laguísimo etcétera. Adquiere un tono de lamento en donde abundan las imprecaciones y las preguntas a la razón insufrible de su inhumana y extrema situación. Y reza así:

ÁFRICA.¿Quién plantó en ti las semillas
de la guerra?. ¿Quién quemó este vergel?
¿Quién sembró aquí árboles de dinamita
y arrancó los bosques y sembró la ira
con mil tratados de humo y papel?
¿Quién cambió los bosques por agricultura
y los dejó yermos y después muertos?
¿Quién mató tu Naturaleza y tu cultura
y dejó los poblados desiertos?
Corazón de Ruanda,
alma de Burundi,
tránsito hacia Uganda,
desde Bujumbura hasta Vitshumbi
y desde Kampala hasta Kigoma.
Tanzania y Congo te verán morir
desde Kigali hasta Goma.

¿Cuántos muertos se necesitan para abrir los ojos?.
¿Cuántos genocidios como el de los hutu?
¿cuánta hambruna tendrán que resistir?...
¿Cuántos tiranos y cuántos Mobutu?.
¿Cuántos desalojos?
¿Cuántos niños esqueléticos
y locos armados
y militares protegidos?...
¿Cuántos sufrimientos tendrán que vivir?...:
Tiranos frenéticos
locos desalmados,
despiadados forajidos,
mercenarios sin entrañas y descerebrados.
Patriotas apátridas con un arma de fuego
y las tribus vecinas con la vida en juego...
¡¿QUIÉN CAMBIÓ TU ABUNDANCIA POR HAMBRUNA?!
¿Quién quemó tus selvas para obtener campos desahuciados?
¿Quén se jugó tu belleza a los dados?
¿Quién descubrió tu riqueza inoportuna?...:
diamantes de sangre, petróleo de miseria,
oro que convirtió tus tierras en basura,
esmeraldas y coltán para la histeria...
Allí la codicia se apresura
y las vidas se venden como ganado,
al mejor postor y al más desalmado.
¡ÁFRICA, UN DOLOR QUE NUNCA ACABA,
UNA INJUSTICIA QUE CRECE CON LOCURA
Y EN TODAS PARTES SOCAVA
EL CORAZÓN DE LA AMBICIÓN Y DE LA ENVIDIA!
Y mientras el poderoso blanco adinerado
que especula con tus materias primas,
sus ganancias acrecienta hasta el infinito,
ve tus sufrimientos con desidia
y esconde de la denuncia todo escrito,
mientras el propio africano vive proscrito
en su propia tierra y en su casa.
Africa va sembrando de sangre y veneno
sus tierras diezmadas y la gente que vive y la que pasa
y ve impasible, cambiar sus climas...
Ve crecer el desierto, morir la sabana;
arruinarse lo inocente y lo bueno,
crecer la miseria y la desgana
y emigrar las tribus y el ganado
y dejar las ciudades y el poblado
hasta que la Muerte arramble con todo
y nos deje sólo arena, sangre y lodo.

Ni siquiera tu fauna, perseguida,
sobrevivirá a esta hecatombe ya anunciada.
África, toda ella será una estampida
que, a su paso, dejará una nube polvorienta
que dejará tras de sí una enorme Nada,
una tierra moribunda, quemada y sedienta
donde no podrá sobrevivir ninguna forma de vida
y una piel carcomida en sus entrañas,
llena de excavaciones tamañas
que, lo que fueron minas, serán simas profundas
que conectarán con el mismísimo infierno.
Reptarán alimañas inmundas
y monstruos salidos del averno...
Ni rastro de la vida que hoy la habita,
ni rastro del dolor que en ella grita...
Sólo un inmenso Sahara árido y muerto,
sin riqueza ni plantas ni oasis incierto

MANUEL MILLÁN CASCALLÓ


domingo, 18 de diciembre de 2011

AL OTRO LADO DE MI SPEJO ESTÁ TU ROSTRO

Al otro lado del espejo está mi rostro es un caligrama mixto, que integra, en el recorrido del poema dos caligramas locales, el primero inicia el poema con el recorrido pendular de una espada de Damocles, la que determina el inicio del poema (cadáveres hay enterrados bajo el suelo) y representa las obsesiones ocultas, los deseos incumplidos que me atosigan escondidos y recónditos en la memoria. El otro representa una imagen de mujer, una cara que aparece en un espejo. Desvela éste el sentido del poema, los cadáveres son los recuerdos que evocan una mujer desconocida o no, hecha de evocaciones, anhelos y sueños que surgen de mis obsesiones... Allí, el marco revela: La verdad, la mentira hinca su diente en un cabello... y la imagen reflejada aclara... Es una sombra y sueño (parte superior del cabello hasta la curva de la melena). ¿Dónde está tu rostro? (Gira en el mismo sentido. El interrogante compone un ojo y la pregunta recorre la frente y el resto de la melena hasta empalmar con el sueño). Me pregunto y sé (el me completa el ceño siendo la vocal el ojo derecho; pregunto compone el moflete de la cara, la barbilla y el cuello; Yo es la nariz y sé, la boca)... Entre una y otra forma caligramática, el poema recorre su camino: Guillotinando el cuello / tu reloj duda entre un segundo y el siguiente...

Abandonado el espejo, el poema concluye...: Mi antíresis me mira (referencia a la imagen del espejo), mi imaginación delira / y no soy yo quien reposa / sino un rostro de deseo. / La mujer es lo que veo, / pero mi mundo es de hielo (es el espejo que atrapa el rostro del espejo) / y juega conmigo a los dados. / Tiene mi enigma / un negro abismo / donde habita un féretro / con el retrato de mí mismo...
Con ello mi poema, con raíces surrealistas coloca en el deseo la vida y en la vida real, donde mi rostro habita, la muerte en vida. 

El poema compone una serie, pues de símbolos con paralelismos entre la antítesis alegórica, la paradoja expresada como amplificatio y el oximoron continuado.

Los caligramas de recorrido, mixtos y los locales son una constante en mi obra. Éste, por ejemplo, es del 2008.

Mi poema completo rezaría así:
Cadáveres hay enterrados bajo el suelo.
Guillotinando el cuello,
tu reloj duda
entre un segundo y el siguiente...:
La verdad se muda
y la mentira busca su diente
en un cabello.
Es una sombra y sueño...
- ¿Dónde está tu rostro? -
Me pregunto y sé..
Mi antítesis me mira,
mi imaginación delira
y no soy yo quien reposa
sino un rostro de deseo.
La mujer es lo que veo,
pero mi mundo es de hielo
y juega conmigo a los dados.
Tiene mi enigma
un negro abismo
donde habita un féretro
con el retrato de mí mismo

MANUEL MILLÁN CASCALLÓ



sábado, 10 de diciembre de 2011

EL POZO DE LA AMARGURA

Un caligrama de recorrido implica la mezcla del poema puro con elementos o partes caligramáticas, telegramáticas o caligramas propiamente dichos, como este caligrama en el que recorrido, y caligrama se funden dando a estos últimos sentido simbólico de senaciones, desde la caída al pozo de su inicio (letras mayúsculas y criptogramas para la caída y la palabra POZO dándose forma a sí mismo), la espada que habla de sí misma (CON ESPADAS DE IRA), o la copa de vino llena que implica la forma en cómo se ahoga o se intenta difuminar la amargura en alcohol (sino la dulce sensación, en el borde de la copa, de una generosa copa de tinto vino, formando la copa, que transporta , hasta la T es la el tallo de la copa y la A su pie o base, ese sabor celeste de placer divino, conformando el vino tinto en sí mismo). La frase, NO QUIERO RECORRER ESE CAMINO, en mayúscula y en el centro hace de límite entre el primer recorrido y el segundo y también de línea que separa la suma de la primera parte, de su resultado, que no es otro que la segunda.

Mi poema quedaría así:
                                     ABCES KIGO
AL POZO de la amargura
y rompo los silencios
CON ESPADAS DE IRA,
que son desolación, premura,
la daga que aguda y clavada expira
por no encontrar el sabor del gozo
y sí el del pesar que delira...:

NO QUIERO RECORRER ESE CAMINO

sino la dulce sensación
de una generosa copa de tinto vino
que transporta
ese sabor celeste de placer divino
al paraíso del deleite soñado,
al plato donde se hibridan los sabores
y trazan hadas voladoras los olores
que viajan al lugar añorado
donde vuelves a ser un niño
feliz, feliz, jugando a ser pájaro risueño
que pía y pía libre y sin dueño
por el cielo azul de ensueño
donde todo alcanza lugar y aliño
para ser promesa premio de tu empeño,
placer de los placeres liberado,
razón por la que vives confiado
recorriendo un mundo infinito y halagüeño

MANUEL MILLÁN CASCALLÓ

Se resume pues un viaje de huida a los placeres para borrar los horrores, los errores de la realidad





sábado, 5 de noviembre de 2011

GUSTAVO ADOLFO BÉCQUER

El caligrama glosa la figura del poeta y autor de leyendas sevillano del postrromnticismo o romanticismo intimista y desarrolla, en cabeza y cuello, mi poema que versa sobre las caracteristicas temáticas y tratmientos, sobre las obsesiones del poeta en sus dos obras más destacadas (Rimas y Leyendas). Se centra en sus obsesiones por un modelo femenino inalcanzable y deletéreo y alude al trágico final del enfermizo literato.
 
El poema, en dos estrofas, muestra el paralelismo entre su vida y su obra: la búsqueda de un amor que se identificase con su poesía de armonía sutil (siempre en rima asonante y distribución arromanzada) y caracterizada en una mujer platonizada inalcazable que nunca encontró en la realidad aunque lo identificase con varias mujees reales (como las hermanas Espín o su propia mujer, quien le traiocinó) y como esta búsqueda le llevó en sí a la muerte.

Rimas y Leyendas nos mostraron esa mujer inalcanzable que identificó con su poesía y que siempre identificaba con ser colocado en un plano superior, divino. Más dulce y deletéreo en sus Rimas, más frío y cercano a la belle damme sans merci del amor cortés, en sus Leyendas, y, en ambas con alguna trasposición de modelo (así en su poesía llegó a mostrar el desengaño del desamor que había sentido en vida y en las leyendas llegó a verdaderas ensoñaciones fantasiosas, mujeres inventadas por el ansia obsesiva de alcanzar ese modelo de mujer, como en El rayo de luna).
 
El poema refleja esta dualidad. En la primera estrofa, de rima asonante en aguda en los pares (por lo tanto, alterna y arromanzada), viaje de su figura a su poesía y sus contenidos principales y a esa identificación de belleza con pureza, de pureza con armonía, de armonía con poesía y de poesía con mujer que equiparaban poesía y música como constatan sus Rimas
En la segunda estrofa, parte de las leyendas, desfila por las mujeres representadas en ellas y el modelo que tipifican y vuelve a la relación de esa búsqueda del amor y la mujer perfecta e insustancial que tipifica y cómo esa búsqueda le resultará letal en su vida. No renunca aquí a la rima asonante, pero se inicia con rima cruzada para volver a la rima alterna, sólo que, ésta ez, en las impares.

El poema reza así:
Llevas en tu rostro escrito el enigma 
de tu vida. Tú que buscaste amor
donde no lo había y allí encontraste
formas, que no esencias, donde el color
te sugería damas de belleza
hipnótica y arpas cuyo dolor
destrenzaba una amarga melodía
distinta a la que en principio sonó.

De leyendas poblaste fantasías,
mujeres rodeadas de pasión,
pero etéreas, si no de piedra fría,
marmóreas y bellas sin corazón.
También hermosas doncellas nostálgicas, 
beatrices platónicas al son 
de evocaciones sutiles y mágicas
que tu dulce poesía pintó
enamoradas para, al fin, trocarse
en amarga herida que desoló
tu ánima envenenada, frágil, triste,
y tu cuerpo enfermizo destrozó.

MANUEL MILLÁN CASCALLÓ

miércoles, 12 de octubre de 2011

CIUDAD ENCANTADA II

El caligrama representa una de las figuras de piedra características, probablemente la más conocida, de la Ciudad Encantada de Cuenca. Unas rocas que ha tallado la erosión aérea, acuosa e incluso los hielos invernales y que han adquirido caprichosas formas que nos recuerdan animales, cabezas humanas y monstruos. En sí, es más un pictocaligrama que un caligrama. El poema se aglutina por completo en la roca y sus sombras y en unas rocas más cercanas en el espacio y deja al dibujo los árboles y arbustos, la vegetación, el paisaje y algunas rocas y piedras menores con sus sombras para recrear el paisaje, de por sí enigmático y sugerente. El poema que lo conforma, mi poema, precisamente versa sobre esa capacidad de sugerencia del paisaje, su carácter hipnótico, mágico y sugerente que nos induce a liberar la imaginación y con ella, nuestras pesadillas y nuestros miedos. Esa capacidad de sumar intranquilidad a la fantasía y recrear nuestros miedos ancestrales que seducen nuestra imaginación. Hay una interrelación entre el poeta y lo imaginado, estableciendo un incontestado diálogo entre ambos que muestra la lucha entre realidad e imaginación sugerida, y dice así:
Bajo tu pétero sombrero,
tu rostro enigma de gigante...
- ¿Qué hiciste con tu pellejo de cuero? -
Quizás el suelo atrapó, impresionante,
todo tu enorme cuerpo entero.

Tú me miras atento y vigilante,
preso también de esta ciudad hipnótica
encantada por magos del Averno
donde las piedras aprisionan sueños,
monstruos y animales cuyos dueños
se retratan junto a la puerta gótica,
recordando habitantes del infierno.

¡No me mires más!... ¡Me das desasosiego!...
No quisiera perder tanta belleza
y quedarme ante ti ya mudo y ciego
porque tu fantasma enloquezca mi cabeza.
¡Déjame verla, mente, te lo ruego!.

MANUEL MILLÁN CASCALLÓ





miércoles, 21 de septiembre de 2011

ATAÚD DE PALABRAS

Ataúd de palabras es lo que se denomina como un caligrama figurativo de recorrido, en donde el poema recurre a una sucesión de caligramas figurativos sintéticos, en este caso, sin inserción de versos clásicos (sólo caligramas) y cada uno de ellos símbolo y representación de lo que dice. Así, desde que empieza hasta que muere. Las palabras se guardan en un ataúd, símbolo de una sociedad deshumanizad y mecanizada que rechaza el diálogo y los sentimientos, rechaza los sentimientos sometida al tiempo que lo atrapan y los dominios poderosos en la realidad que vive (la intransigencia del capital, la urgencia del día a día en su supervivencia). Por eso, el ataúd se inscribe en la esfera del reloj, del que las palabras, con su voz son las agujas y la vida y su recorrido, la esfera que recorren hasta la muerte, una tumba con su lápida y su cruz, posterior y ajena a la vida (por eso yace fuera del reloj de la vida, en la muerte), que comienza a esculpirse en la soledad del hombre que no puede esperar ayuda ajena, pues no es oído por nadie (Por eso ni esperes de nadie buenas palabras, constituyen su lápida y que nunca van, su cruz).

Atrapado en la soledad del que no es escuchado por la millonaria soledad que le acompaña, la hierba de esperanza de su alma (A llenar tu alma) son el nexo que le acerca a un nuevo reloj de esfera, donde la O de la hora es la esfera y la R sintetiza las agujas y sirve de apoyo para un definitivo reloj de péndulo oscilando la incertitidumbre que componen los versos del poema como una espada de Damócles que se columpia describiendo la letal curva de su final, escrito en su curva, su destino, con la despedida difuminada en el movimiento de la oscilante cuerda.

Si el sentido del caligrama y del poema ya se han explicado en la descripción del mismo, bajo él, reza el poema, mi poema, que lo compone, componiendo un nuevo caligrama, un caligrama de espectro, en el que los versos componen una crátera griega que oculta las cenizas de su cadáver, la palabra, el diálogo que nuestra sociedad, que el poder del dinero, del capital y de la urgencia de una vida superficial y material, de consumo, no sólo ha matado de soledad, sino que ha incinerado para que nunca deje constancia real de suss sentimientos, sus emociones, su razones y su humanidad. La despedida, al pie es un grito de impotencia que muestra lo inútil que puede ser la palabra cuando nadie quiere escucharla: Es una palabra muerta en el sinsentido de la comunicación.
El poema, y nuevo caligrama, reza así:
Ataúd que guardas las palabras,
no dejes que tu voz
escriba en tu reloj
l a     h o r a,
ni esperes de nadie buenas palabras
que nunca van a llenar tu alma.
Tu hora está al llegar,
tu vida acabada
busca su final
a la hora
señalada.
Y es ahora.
DESPÍDETE

MANUEL MILLÁN CASCALLÓ






lunes, 19 de septiembre de 2011

ESTAMPA ANTÁRTICA

Describiendo poéticamente los lugares, los continentes de nuestra Tierra, Mundo, demonio y carne, mi poemario, recoge este caligrama de paisaje invernal y gélido en el que un pinnípedo, una foca otea, recién salida de las frías profundidades del Océano Glacial Antártico la plataforma congelada con un cortahielos atrapado más allá de la línea del horizonte. Un invierno crudo, letal e infernal donde la Naturaleza ha hallado un medio para sobrevivir, en el límite del frío, allí donde la mano del hombre es la excepción y siquiera los vertebrados son capaces de ir mucho más allá de las zonas costeras para adentrarse en las montañas que constituyen el helado continente del Sur.

Así mismo, mi poema retrata el contenido como si el caligrama fuese el documento de lo anteriormente dicho,
la fotografía de su propia imagen. Emplea una suave rima asonante (que ocasionalmente se convierte también en consonante, como si los sonidos fuesen, como la fuerte ventisca antártida, combinada con las sombras ocasionadas por la mezcolanza de nubes y nieve y hielo arrastrado por los vientos, un desfile de sombras que semejan fantasmas corpóreos de monstruos imposibles) y una métrica regular, buscando una armoniosidad adormilada, como atrapada por el propio frío antártico.
 
Y reza así:
Donde el blanco horizonte
es un falso suelo congelado
en el que encalla, laso, el cortahielos,
atrapado por sus frís manos
entre sus garras curvas como hoces.
Asoman diamantes en roquedos.
La piel de la Antártida inventa suelos,
reflejos fútiles de ilusos soles,
mientras otean focas, orcas y otarios
buscando peces, entes estrafalarios,
pingüinos que llevarse al buche
allí donde el infierno es albo y frío
y el cielo vive enredado entre nubes
que poco desenredan de su lío.
El propio cntinente se prolonga
en una plataforma de piel de esponja,
pero dura como mármol de lápida,
que oculta un mar de aguas oscuras
donde, sus habitantes, sombras pálidas,
danzan una coreografía inventada
de cazadores, presas y de fugas
que a vida y muerte ponen risueña máscara
mintiendo su drama de pasiones rudas

MANUEL MILLÁN CASCALLÓ


martes, 30 de agosto de 2011

VENUS DE WILLENDORF

Cerrando la serie Primera de Venus Paleolíticas, representación de la Diosa Madre y la fertilidad, la más clásica, clara y característica, la Venus de Willendorf... Meridianas su sensualidad, el rostro inclinao, claro su peinado o tocado, no su cara, y brazos minúsculos, es sin duda el parangón, el modelo clarividente de lo que se desea representar, una mujer embarazada... Oronda y recatada.., clara representación de la Madre universal, la Diosa Madre y la Madre Tierra.

El poema que compone el caligrama redunda en los mismos aspectos que las anteriores, pero no ignora, su recato, su condición humana y sus formas clarividentes. Es una invocación a su carácter divino y a su forma humana con un carácter lírico así como a su representación de mantenedora de la vida y de promesa futura. Reza así:

¡Madre!. ¡Madre Tierra!:
Recatada mirabas tus formas,
oronda diosa embarazada...:
Senos de amor,
abdomen grávido de futuro.
Saliste del oscuro
describiendo tus normas
allí donde no había resplandor,
pero estabas tú, Diosa enamorada
del hombre, de su vida y de la tierra.
¡Diosa madre!. ¡Diosa Tierra!...
Fértil pasión se agita
en la vida resignada
y se hace en tu vientre, Vida.

MANUEL MILLÁN CASCALLÓ

lunes, 29 de agosto de 2011

VENUS 4

Y siguiendo con las Madonnas, las Venus Paleolíticas, aquí está la cuarta, que se conserva en el Musée des Antiquités Nationals de Sisse Grimberg, al contrario que la anterior, descabezada, más estilizada y menos exagerada en sus formas pero Venus al fin y al acabo y con idénticas características que la anterior. 

Nuevamente el poema que integra el caligrama alude a su condición de Diosa Madre y Diosa de la Fertilidad, a su relación con el sexo y la sensualidad, a su propiciación de la sensualidad y fertilidad, a su sentido enigmático y universal que huye del retrato conciso, a su atemporalidad, a su carácter totémico y a su aspecto real, falto de cabeza y reza así:

Estilizado cuerpo,
simbólico deseo...
- ¿Dónde dejaste tu cabeza?-
Perdida en el Tiempo
como su adorante reo.
Diosa. La lujuria se despereza,
Tótem de obsesión,
sonando está tu son
como un eco de certeza.

MANUEL MILLÁN CASCALLÓ

domingo, 28 de agosto de 2011

VENUS 3

El caligrama es una nueva Venus Paleolítica. El poema mío continúa con los carecteres de las anteriores Venus que componen la serie I de Madonnas Paleolíticas. Sólo que en este caso alude a lo que carece tanto como a lo que se nos muestra en este fragmento de Venus

El poema reza así:
Rostro. Rostro insinúas...
Estilizado cuello,
paradigma de cuerpo bello
que perdió sus formas desnudas,
pero Diosa, seguro,.
La fértil bendición que ocultas
en tu garfio desnudo

MANUEL MILLÁN CASCALLÓ




viernes, 26 de agosto de 2011

VENUS 2

Y siguiendo con las Venus Paleolíticas, con las Madonnas que representan a la Diosa Madre, la Tierra en sí misma, y la fertilidad de la Tierra, de las mujeres para perpetuar la especie, de la Tierra para ser feraz y de los animales que la puebla para ser igualmente fértiles, aquí tenemos el caligrama que retrata la segunda Venus y aquí, más allá de la figurilla conservada en el Museo de Brno, tenemos también la sombra, indicadora de la oscuridad de la cueva donde se halló y el nexo mágico propiciatorio integrado en el caligrama como contorno
de la estatuilla.

Mi poema, que compone el caligrama, incide en los aspectos propiciatorios de la fertilidad en todos los grados mencionados, en su carácter relacionado con la sensualidad y con el enigma de la mujer representada (una concreta, todas, en una edad determinada o en una ceremonia concreta o del simple hecho de la maternidad), pero como la anterior, grávida y mostrando, quizás un estado de belleza, o el estado de naturaleza preferido en la mujer... y quizás el que determina su poder social en aquellos remotos clanes del Paleolítico Superior que ya han demostrado conocer, más allá del fuego, las artes de la caza y la habilidad para construir instrumentos de caza y pesca, percusión, grabado... Conocer la Muerte y la Vida, con sus ciclos vitales, el poder de la fertilidad como sustentador de su mundo, la religión  y el culto, la magia, el arte, el poder y desgraciadamente, la competencia y la guerra y quizás hasta el lenguaje escrito en los signos que acompañan a las representaciones figurativas y perfectas de animales... El ser humano, en cambio, sigue siendo un enigma sustentado por el tabú... su figura carece de rostro, de personalidad, y sus formas, al contrario que las perfectas de los animales, aparece aquí caricaturizado, deforme, estilizado  exagerado... una dramatización de lo que se busca que, desde luego, no es el retrato, quizás porque éste se asociaba a dominar la imagen representada concreta. El individuo se somete al clan y el clan al poder de los expertos en cada tarea...:

El poema que compone el caligrama reza así:
Rostro de enigma,
pero mujer sin duda.
Madre divina,
hambre desnuda...
¡Perderte sí sería un estigma!.
¡Tenerte!: Bendición
que discrimina
entre tenerte o no...
La vida se columpia caprichosa,
Madre diosa,
Madre divina.
Para vivir no existe otra cosa
que tus formas
y el cetro varonil en tu diana.
Promesa de futuro,
tu ventana,
ese pozo profundo y oscuro
que promete tu vientre maduro.

MANUEL MILLÁN CASCALLÓ

jueves, 25 de agosto de 2011

VENUS DE LESPUGNE

Formando parte de la primera serie de caligramas dedicadas a las Venus o Madonnas Paleolíticas que se muestran en el poemario Mundo, demonio y carne, y perteneciendo a Mundo, dentro de su parte En el origen, dedicada a la hominización en el que evoca el proceso evolutivo de la especie humana, tanto física, como cultural, como económica y tecnológicamente, las Venus, como muestra del arte mueble del Paleolítico Superior, esta Venus forma parte de un conjunto de cinco, siendo la primera de la serie, y en ella, en cada Venus, como en ésta concreta, se glosa su sentido, su relación idiosincrática con la Tierra y su equiparación con la Diosa Madre, que no dejaba de ser la Tierra misma y con ella, la fertilidad, la propiciación de la misma para la perpetuación de la especie y de todas aquellas que sustentaban la economía alimentaria y el clan en sí mismo sin olvidar su sentido estilístico de la belleza.

Claramente un caligrama, el poema que la compone reza así:
Dijiste evolución...
¿Quién lo sabía?...
De volúmenes sensuales
creaste tu motor
de estilizada poesía...
La Madre Tierra,
la Madre Hembra
de los hombres
y todos los animales.
Tus formas
fruto son
de la obsesión.
Madre fértil,
Vida fértil,
Madre divina.
Tenerte viva
era su misión.

MANUEL MILLÁN CASCALLÓ


miércoles, 24 de agosto de 2011

SIERRA PELADA Y SUS VALLES (PARAJES DEL SOBRARBE EN BIELSA)

El caligrama nos muestra una de las cimas de la Sierra Pelada y su bello valle pirenaico y lindante con la frontera francesa como un homenaje a los bellos parajes Pirenaicos, escogiendo éste como ejemplo de la mucha belleza que allí se guarda. Es una exaltación al lugar y su belleza y, con el a la extasiante hermosura de la naturaleza agreste y salvaje de estos parajes. Éste como cualquier otro, todos igualmente bellos, equiparados en su hermosura aunque distintos en su forma...: ¡Todos magníficos!....

El poema que articula el paisaje, también mío, comienza por la estampa en sí misma, su relación con sus habitantes humanos y animales como historia acumulada para después, ubicarlo en su lugar concreto en el mapa, señalando su belleza divina, su paz y cómo fusiona distintas estampas según la estación del año y según la presencia o ausencia de sus impresionantes tormentas... Y reza así:

Montaña arriba, entre verdín y roca,
la frontera es un fantasma invisible
que recorre las aristas, sinuosa,
del Alto Pirineo inaccesible,
donde vacas y rapaces escriben
la plácida pureza de una estampa
primorosa escrita por las hadas,
escrita por pastores, montañeros,
estraperlistas, alimañeros,
cazadores y recios leñadores,
contrabandistas y hasta bandoleros
que conocen las chovas piquigualdas,
los rebecos y águilas y los osos
y los ya desaparecidos lobos.

Sierra Pelada, en el túnel de Bielsa.
Su valle y las escarpadas laderas...
desfiladero al Norte y, escalando,
el valle de Pinarra, su ibón negro,
el valle de Barroso y praderías...
El pico de algún dios enamorado
esculpió este paraje en unos días
que buscaba un jardín para su cielo
y mezclando roca, pasto, nieve y hielo,
nos dejó este edén del tiempo olvidado...

Sobrarbe al Sur; al Norte, Francia, umbría.
Paredes que subían a su reino
y lo tocaban con sus pétreos dedos
conformaban la bella poesía
como un caligrama de etérea imagen...
Estética celeste del paisaje,
ya todo belleza y hermosura
del tiránico y colorido Sol.
Los verdes y el celeste azul, verano;
del níveo blanco a los inviernos fríos,
de siempre, nubes de tu faz oscura,
la tormenta que a todos aterró,
el afilado acero de ventisca...:
De la paz a tus arrebatos cabríos,
voluble y caprichosa como las divas
y espléndida en tu voz impresionante
de tus montes de presencia altiva,
de tus empinados valles, detonante...

MANUEL MILLÁN CASCALLÓ

lunes, 22 de agosto de 2011

LUCY (Australopithecus afarensis JOHANSON) PRIMER HOMÍNIDO CON NOMBRE PROPIO

Lucy fue el primer homínido, el primer australopithecino, al que se le dio un nombre humano como reconocimiento a la proximidad con nuestra especie, como un eslabón evolutivo hacia nosotros, el Homo sapiens sapiens. El caligrama nos la presenta con la reconstrucción deducida por Joel Rak a partir de los restos óseos craneales del especimen. El poema nos habla de esa búsqueda de la cercanía y del parentesco que se buscaba y que halló su mejor expresión en la mirada hipnotizadora e inteligente que le confiere esa proximidad humana que en los restos óseos sólo saben ver los paleoantropólogos.

MANUEL MILLAN CASCALLÓ

miércoles, 27 de julio de 2011

JABALÍ (VALLE DEL RONCAL)

El caligrama representa, a través de la imagen de un jabalí, las características naturales del precioso valle navarro del Roncal, así como las del propio animal. Destaca, amén de la belleza, la paz, la exuberancia natural de sus bosques, gargantas, riscos y montañas.

MANUEL MILLÁN CASCALLÓ

jueves, 7 de julio de 2011

SOMBRAS DE UN MISMO ALIENTO

El caligrama nos arrastra a nuestro origen común con los monos primates y, con él nos hermana en nuestro parentesco. Muestra una familia de chimpancés, el macho colgado en el árbol, remueve una poza de agua mientras la hembra pasea su cría para buscar nuestros rasgos comunes, visibles en la morfología y en las actitudes, el macho indagador y lúdico, la hembra vigilante y nos invita a una reflexión que, como poema, diseñan las formas de los primates, los árboles y las piedras. Es una reflexión supuestamente trenzada por nuestros parientes antropomorfos sobre su parentesco, la evolución y la idea de primitivo y salvaje lanzada como una acusación... ¿Quién es realmente más salvaje, quién sigue su instinto o quién maquina racionalmente en su provecho egoísta y transgrede las normas de supervivencia llegando al verdadero mal racional por interés?... Es una verdadera acusación al hombre sobre su aleatorio concepto de animalidad y su interesado concepto de racionalidad, al fin y al cabo, hija directa del instinto que la propia supervivencia individual a elevado al infinito para contrarrestar nuestras deficiencias físicas?

Así reza el poema que compone el caligrama:
 
¿Dónde quedó el antiguo parentesco?...
no somos tan distintos en el cuerpo:
Tan sólo te has vestido con el tiempo
con ropaje del todo pintoresco

Tú te has creado un mundo cruel, dantesco,
alimentado de tus mil inventos,
que convierten lo superfluo en bueno
y suavizado tu rostro simiesco,

tu cuerpo alargado y perdido el pelo.
Quizás seas menos bruto y más profundo, 
más racional y capaz de hacer arte,

pero eres más malvado en tierra y cielo, 
monstruo de vanidad pronto iracundo,
 y tu ambición te lleva a propasarte.

Alardeas de tu saber inmenso 
y te crees un dios que domina el Mundo,
mas, si éste muestra su poder intenso,

te reduce a ser un títere bobo, 
y vuelves a ser nómada errabundo
que se teme a sí como su gan lobo.

¿Me llamas salvaje porque voy en cueros?.
¡Mírate bien y verás en tu espejo 
que, más allá de tu oculto pellejo,
eres más salvaje y con menos fueros!

Querías un edén sin seres fieros 
y olvidaste que eras tú el más sangriento,
que no mata por hambre ni por miedo,
sino por ambición y por poder ciegos.

MANUEL MILLÁN CASCALLÓ



domingo, 26 de junio de 2011

MI MOCHILA

Como una prolongación de mí mismo, mi mochila de cuero me acompaña, llevando mis portaminas, mis rotrings, rotuladores y gomas como varios poemarios y caligramarios cuyo contenido es fruto del momento en que me asalta la inspiración y la idea... Poemas, caligramas, pictogramas caligramáticos, dibujos poemados y dibujos retratos de la inspiración del instante, de la sugerencia del ahora o del capricho del entorno que los ensalza hasta convertir lo imperceptible en evidente y lo evidente en creación sensible... Mi mochila es pues, obra y sentimiento, sensación sensible, evocación que se crea y se describe a sí misma en palabras, en imágenes o en la fusión de ambas.

Fusión de caligrama y pictograma, pertenecería a los pictocaligramas con más de caligrama que de pictograma. El poema que contiene y lo configura es fiel redacción de lo dicho y reza así:
Guardo, en mi mochila, trozos de mi alma,
mi corazón, mis sueños  diseñados
y aún por diseñar... juegos de dados...
mi pasión, mi herida, mi mar en calma,

mi tempestad y el garfio que ensalma
la retahílade los recordados
momentos de mi vida, amordazados
o libres y, de mi mano, en la palma,

prestos a ser plasmados en vocablos
y a hacerse de imagen y poesía,
barco que la mente arrastra a la vida,

vida que renace en los establos
donde duerme la belleza y se alía
con la creación fugaz de mi herida.

Guardo, en mi mochila, estelasfugaces,
gajos de la naranja de mi vida,
jirones de la piel, vértigo herida,
planeando como espectros rapaces

que hilvanan mis sensaciones veraces
y dibujan el plano de mi huída
hacia un espacio donde, sin medida,
manen ríos de creación sagaces

y urdan universos vivos de activa
electricidad simiente sonora
que un paisanaje alumbre y nos describa

habitando su fehaciente ahora
como palpitantes seres de un mundo
infinito y brutal cual errabundo.

MANUEL MILLÁN CASCALLÓ



viernes, 27 de mayo de 2011

DE CANSANCIO Y ATONÍA (AUTORRETRATO ÚLTIMO)

Nuevo autorretrato en caligrama. Mi poema y caligrama retratan la sensación de cansancio, de frustración, de hastío provocado por el imparable molino apisonador de la rutina, por una sociedad que no sólo no ofrece alicientes, sino injusta e hipócrita que dilapida esfuerzos e ilusiones hasta convertirlo todo en harina de existencia en el sinsentido. Una sociedad sin esperanza ni escapatoria que se alaba a sí misma en su mediocridad y que no ofrece alternativas ni direcciones posibles a los desilusionados, a los indignados ante una sociedad cada vez más global y bipolar entre los poderosos y los marginados del poder y que, en estos últimos abre abismales distancias entre los supervivientes con medios, empleos y seguridad frente a la creciente multitud de marginados por estamento social, sexo, desempleo, ideología, raza y ubicación en una comunidad, barrio, estado, población...

Una sociedad sorda, egoísta, gris y casi cibernética donde pocos pueden siquiera reconocer su rostro.

Sí, indignado, cansado de luchar contra los sordos oídos de quienes sólo se escuchan a sí mismos desde los tronos de un poder conseguido con la simpiedad, el abuso, la corrupción y el ventajismo social y político, pero aún capaz de identificar mis señas de identidad... Aún resisto, cansado, hastiado pero vivo.

El poema que contiene y compone mi rostro dice así:

Tiempo sobre tiempo estrangulando el tiempo.
Soy sólo un fantasma de blancos cabellos
que busca recuerdos y sueños perdidos
entre los recovecos de mi pasado
como cuerpos oscuros y semienterrados
que giran el vértigo, adormecidos.

Mis largas barbas buscan el suelo duro,
mis curvos lentes, espejos de mi mundo,
han visto tanto, que ansían un descanso...
Cansancio sobre cansancio y atonía.
El molino de rutina desvanecía
las ilusiones que su paso ha matado.

El tiempo y su guadaña todo ha segado;
atornillando está al suelo el cuerpo ajado,
buscando las raíces de mis ancestros
en la carne pedregosa de los tiempos.
Danzan Vida y Muerte con vértigo ebrio,
socavando de adioses todo presente,
arrancando a jirones de mi mente
los nexos que aquí me mantienen despierto.

MANUEL MILLÁN CASCALLÓ


viernes, 29 de abril de 2011

ESPEJO DE CIUDAD

Entre el caligrama y el pictograma caligramático, la imagen del poema muestra un edificio urbano, equiparable al de cualquier ciudad del mundo y como elemento representativo del mundo actual como de la sociedad occidental en sí misma. Las letras que componen el poema, a la clara luz solar del día, se muestran atrapadas en los cristales que componen la fachada acristalada del mismo en equiparación simbólica a la de sus propios habitantes, igualmente presos de sí mismos, de la ciudad, de la realidad que viven y de su propio entorno.

A la sombra o a la luz del día; en clara transparencia o en penumbra, el poema grita su angustia vital al mundo que lo contempla en una soledad tan inhóspita como la del propio edificio.

El poema, reza así:
Desde tu prisión de cristalinas rejas,
la alucinación de bosques y palmeras
que oculta el acantilado de edificios
y la red de asfalto que cubre las quejas
de los habitantes a quien desesperas,
del pueblo millonario en penas y oficios,
preso de tus artes y arcanas calderas.
Ignoran tu infierno tras de escaparates
y viven el sueño de tu ambiguo nexo.
Tu bella paz de diseño esconde tus zarpas,
las cadenas que niegas tras los dislates,
tu engañoso espejo cóncavo-convexo,
tu asesina sirena tañida en arpas,
imán de navegantes de todo sexo
y tus fauces de caníbal bajo techo,
disfrazando tu verdad de ogro maltrecho

MANUEL MILLÁN CASCALLÓ

viernes, 22 de abril de 2011

EN ESTOS TIEMPOS EN QUE REINA LA HIPOCRESÍA

El caligrama mezcla las técnicas del caligrama con las del pictograma para fusionarlo con la imagen. El poema diseña las figuras humanas principales, las que están completas o casi completas en primera fila para diluirse en la masa humana y ésta en el paisaje urbano de una ciudad griega, Atenas, que podría ser cualquiera de la Comunidad Económica Europea, de Europa, de EEUU, de Japón... que protesta contra las medidas que los gobiernos toman para superar la crisis: cargar todo el peso en regular los salarios de las clases trabajadoras y el funcionariado, reducir, plantillas, rebajar sueldos, congelar y reducir pensiones y gastos sociales... mientras los gobiernos ayudan a banqueros y grandes empresarios, accionistas, especuladores y grandes fortunas y grandes salarios de los acomodados que, amén de haber provocado la crisis, se regodean de ella  y de nosotros utilizando las ayudas para pagar sus pluses y sus sueldos estratosféricos y ahuyentando toda posibilidad de aumentar impuestos y medidas fiscales contra sus abusos.

Caligrama, imagen y poema, se centran en las airadas protestas griegas que preceden a su hundimiento económico y posterior rescate para mostrar el descontento social, la ira desatada y desatendida por los,  poderes sociales y económicos en busca de salvar el sistema económico, el capital, sus puestos, su poder y sus pudendos traseros en sus poltronas, amé de los estados, los partidos políticos y sus estructuras, haciendo recaer el peso de la crisis sobre los más desamparados (parados, obreros, pensionistas, emigrantes, marginados...) y sobre el funcionariado para salvar las economías  globales, particulares, bancarias y estatales, mientras colocan en la picota a las masas, expolian y minimizan sus conquistas y ayudas sociales, reducen sus plantillas y gastos sociales sin asumir ninguna medida contra los pudientes, los especuladores y los poderosos que sustentan un sistema corrupto e injusto abocado a abismar las diferencias sociales, reducir las ayudas sociales del estado de bienestar y las clases medias y aumentar el proletariado e beneficio de una economía global y de mercado y que son, en definitiva, los verdaderos y principales factores que han provocado la crisis.

El abuso de unos, viviendo por encima de sus posibilidades, falseando bajas en el trabajo, malgastando capital, y que constituyen las clases menesterosas, no oculta ni desdice de un abuso y corrupción mucho mayores y decisivos de las clases pudientes y sus especulaciones estratosféricas, mentirosas y abusivas.
 
Si la imagen muestra el enfado social de los que realmente sufren la crisis, el poema lo avala y certifica y me coloca indefectiblemente al lado de éstos, al lado de la justicia social y de la denuncia y al lado de sus airadas y justas protestas.

El poema reza así:
Arde la pasión, prende la ira toda fuego.
Voraz tu frío corazón pintando de Muerte
la vida de quien lucha, arduo sudor, por su suerte
y, día a día, la pelea, forzando su ego

tan sólo por vivir apasionado cuan ciego.
Mas viene la avaricia pisando siempre fuerte
y acaba con el Mundo, arruinado, cuerpo inerte
que, por su corrupción, herido, es dolor y ruego.

Y en manos del dinero, carga su deuda al pueblo,
la crisis que su ruindad ha provocado, abismo,
del que quiere salir indemne con su cinismo,

pone las cargas del Estado en manos del pueblo,
y vive, en la riqueza, del vulgo engañado,
vendiéndonos, que, el funcionario, es quien lo ha arruinado

Y arde la pira, al fin, de indignación desbordada,
vuela en pedazos la paciencia, la ira arde en llamas;
raro será que la violencia se ande por las ramas,
la tolerancia se ha convertido en furia y nada

la puede parar: muere la razón apartada
por la sinrazón de la iracundia y mil proclamas
invaden la calle en las gargantas de hombres y damas,
que arrojando están su rebeldía desatada

a quienes los malgobiernan al capricho del dinero.
Y aquí estoy, gritando con ellos, porque soy pueblo,
defendiendo cuanto es mío, cuanto gané y quiero

porque es mi derecho y es derecho de este pueblo
que atruenen las calles la justa ira liberada:
sea la indignación arrojadiza granada.

MANUEL MILLÁN CASCALLÓ




domingo, 17 de abril de 2011

TORO: LA CEREMONIA DE LA MUERTE

El caligrama representa una corrida de toros, surgió, junto con una serie de poemas, en comnemoración, tanto de la bolición de corridas de toros en Cataluña como por el Centenario del nacimiento de Miguel Hernández, quien tanto amó este espectáculo como para guiar varios de  sus mejores poemas y escribir una enciclopedia del toreo junto con Cossío (y no fue precisamente el único, entre otros Federico García Lorca, y su Llanto a la Muerte de Ignacio Sánchez Mejía). Así, el poema y caligrama muestra al ser humano, a la España de casta ante su propia encrucijada ante su ritual más espectacular, más dramático, más atormentado, más humano, denunciado, no sin razón, por los antitaurinos, pero aprovechado de manera injustificable por los independentistas, que bien supieron ver el cariz monstruoso de la muchedumbre alentando y disfrutando de la muerte de un animal sacrificado, pero no supieron apreciar ni el valor del torero que se juega la vida, ni el cariz equivalente de los Correbous catalanes, ni apreciar que la verdadera tortura no está en la muerte del animal (quien además tiene la oportunidad de salvar su vida si mata al torero), sino precisamente en todo lo que le acompaña: ser trasladado de forma vejatoria hasta un lugar donde va a ser vejado, soltarle ante el griterío humano, clavarle banderillas y puyas, obligarle el instinto a empitonar el rojo de la capa y finalmente el sufrimiento definitivo de la muerte, sí, pero para morir nace todo ser vivo... Hay algo peor, salir vivo de la afrenta par repetrirle la tortura hasta el infinito (como haría el Correbou, allí donde sufre un fuego que ve y siente y que le persigue tanto como la masa que le acosa).

El poema insiste sobre el hecho de la ceremonia de la muerte y el sentido, arcaico del sacrificio, y deja en suspenso, pero latente, el hecho de que su supervivencia se debe a esa constación ancestral de medirse ante la bravura y de rito de consagración del guerrero, en este caso, el torero, de superar el valor, el miedo, la muerte, venciendo a la fiera, que desde las prehistóricas ceremonias de iniciación  de un guerrero (que antiguamente se aplicaba a todo varón para consagrar su consunción de la madurez, demostrándole un guerrero capaz de superarse a sí mismo como superviviente ante las máximas amenazas a su supervivencia) subyace en el toreo, como ya lo hizo en los gladiadores romanos, que también se enfrentaron, entre otros, a toros bravos (como ya lo hicieron otros pueblos anteriores, como los minoicos y los micénicos) y conformaron un espectáculo de masas... Y todo y así, el toro, el toro bravo, sin duda debe su supervivencia a esa bravura y a su ligazón a la ceremonia sangrienta del toreo, mal que les pese a los ecologistas, y si sobrevive con los Correbous, seguirá siendo gracias a la tortura que le espera, pero en este caso, sin siquiera la nobleza de defenderse de su agresor, sino como un animal que huye asustado del fuego y de las agresiones de un público cuyo único valor es la protección de la masa...: Si había que acabar con las ceremonias sangrientas y las torturas, mejor sería dejarle intentar sobrevivir en el amplio páramo., en la dehesa.. pero... ¿Le dejarían ganaderos y campesinos?... Mucho me temo que no (y así lo demiuestran los osos libres del Pirineo, o los buitres y sus buitreras)... El toreo, en cambio, se hubiese muerto sólo y por inanición, por simple falta de público... Y sí, el arte sí le debe al toreo ese inefable carácter dramático y simbólico que coloca al hombre ante su animalidad más profunda y animal, precisamente aquella que le coloca en la bestialidad más pura, esa que sólo tiene, tuvo, tiene y tendrá el hombre hacia la Naturaleza, hacia los animales y hacia sus semejantes pero sin la cual, el hombre no sería humano, en la miseria más absoluta y en la grandeza de la creación científica, estética y de solidaridad con sus semejantes que ello representa...

En cuanto al poema, glosa al animal en sí, al toro bravo y de casta en su bravura y retrata su destino que lo ennoblece como animal lo mismo que denigra, no a su matador, tan valeroso como él, sino a quienes disfrutan con el espectáculo de la muerte ajena y obvian el sufrimiento de quienes participan directa o indirectamente. La corrida es presentada como el espectáculo de la Danza de la Muerte. El toro bravo es la víctima propiciatoria del público que ofrece el sacrificio y el torero, el sacerdote de la Muerte, la Muerte misma, en un combate a vida o muerte del que aún puede sobrevivir si matase al torero, algo difícil pero no imposible. El hombre es el público que disfruta en la plaza y vocifera los lances de muerte, la sangre derramada y la danza del torero con su capa. 

El poema reza así:
Toro, negro de luto y de tragedia,
luna bravía en tu frente baldía,
buscando vas la capa y quien porfía
e intuyes el futuro que te asedia.

Rojo de sangre, cortina que media
entre tu honda bravura y su osadía,
marcada estaba tu hora en este día,
si algún lance de casta no remedia

la hora en que la Muerte tenía cita
con tu vida para así hacerla suya.
Danzando estás con ella aquí en la plaza

la danza macabra con que se excita.
Tres veces te clavó vistosa puya
y una más desde el caballo de raza,

y aún amaga la Muerte su estoque
como un presagio en su mano prendida.
Tu instinto es tu perdición y tu vida,
cual su dolor, la suya le trastoque.

Y está la plaza, toda como un grito,
viendo esta danza al son de un pasodoble.
Esa que grita el arte y la bravura

y que convierte tu martirio en rito
y ve en el sacrificio un acto noble,
carnívora de pasión por la tortura

MANUEL MILLÁN CASCALLÓ



jueves, 31 de marzo de 2011

JOSÉ DE ZORRILLA

Y siguiendo la galería antológica de literatos de nuestras letras, homenaje a sus figuras, el caligrama recala en la figura del dramaturgo y poeta don José de Zorrilla, para mostrar en el retrato de su efigio un poema que describe su vida, características literarias, personajes y temáticas más típicas del mismo, así como figuras destacadas de su ingente obra, como glosa a la misma. 

Mi poema, en dos sonetos, reza así:
En verso ha de rimar tu propia vida,
vallisoletano amante de historia
que buscó, de la leyenda, memoria,
de los romances, el tema y herida

de poemas y comedia vivida,
medieval o barroca allá en su noria,
venganza, honor, amante que en su euforia
la muerte citará en fatal partida...

Zumo de Lope o Tirso, galán fiero,
guerrero de Cantar de Gesta, fiel,
cual extracto del mismo romancero...

Desde que a Larra cantaste, poeta
viajero, subiste ya al Parnaso;
Francia, Méjico y Madrid a tu paso
supieron de tu pluma más secreta

y académico de vida discreta
viniste a ser para vivir tu caso.
Y hará para vivir tu noche al raso,
Don Juan o Inés o ambos con careta...

A buen juez, mejor testigo de tu obra,
los lances del amor, los de la muerte
que grabaste en la memoria, zozobra

de emociones que tuvieron la suerte
de ser atrapadas en tus escritos
con sus goces, sus amores y gritos

MANUEL MILLÁN CASCALLÓ


viernes, 25 de marzo de 2011

ESPRONCEDA

Homenaje al poeta romántico José de Espronceda, mi caligrama le retrata a partir de un poema mío que glosa sus características literarias, su carácter rebelde y revolucionario y su idiosincracia de romántico característico como su poesía, romántica por excelencia:

Confín de la romántica poesía,
rebelde carbonario expeditivo,
tu sonoro verso de ritmo vivo
en oleaje trenzaba tu armonía.

Defiende al marginal en rebeldía,
pirata, reo de muerte ya efusivo...
Un fuera de la ley, libre y esquivo,
bandera de libertad por que porfía.

Viviste cual romántico tu vida...:

Macabros cementerios, tarambanas,
amores de locura, nobles damas,
siempre seducidas y abandonadas...

tahúres, siervos de galas profanas,
romances de antaño, amores en llamas,
bodas de ultratumba bien retratadas

tu pluma describió con gran destreza...
José de Espronceda, genio y figura,
en tu epitafio escribe, donosura,
lo que tu voz describe con belleza.
Cuanto dijiste se hizo rima y verso,
lapida de tu certero universo

MANUEL MILLÁN CASCALLÓ

DEDICATÒRIA

Cartel del I Concurs de poesía Dolors Thomas, Cubelles 2011 (II Concurs de poesía La Fita 2011), el caligrama, un variado conjunto de flores que simboliza la primavera, la esperanza, la vida, el colorido y la energía, contiene dos poemas que dan sentido al caligrama que conforman, al tema del mismo y a la dedicatoria de uno de los poemas y del concurso poético en sí, dedicado a la poetisa cubellenca Dolors Thomas, hace poco más de un año fallecida.

Las 3 flores del centro, contienen, por dos veces (una primera se reparte entre las  dos flores violetas superiores. La flor roja, en primer plano, lo contiene por primera vez y en primer plano) un mismo poema de Dolors Thomas: Temps primaveral, que da sentido a las flores del cartel y a su enfático colorido. El poema reza así:
Obrir els sentits a la primavera,
exhalant la flaire vivificadora
que el cor emocionat t'altera
renovant el ritme alliberador... 

Et fa sentir con fràgil papallona
que feliç liba el pol.len de les flors
entre prats i ribes surant rierols
d'aigües cristal.lines on s'acarona.

Tanmateix et sents l'oreneta
xisclant enfollida d'amor que t'empeny...
rasant terra, feliç, enllepolida...

Dins del nostre niu sempre m'espera
l'eix que fa girar feliç ma vida.
Amor meu. Que seri de mi sense tu?

Las flores de uno y otro costado, moradas, violetas, granates y amarillas, contienen mi poema Dedicatòria, dedicado a la poetisa cubellenca:
DEDICATÒRIA
 a la poetessa cubellenca na Dolors Thomas

Plantaves flors per tenir aromes,
gaudir de la bellesa dels colors,
aquelles roses vermelles, Dolors,
tan delicades com les fràgils plomes
de les aus del cel, que tu, Dolors Thomas,
perseguies amb els ulls entre flors.
I flors al camp i, en els teus versos, flors,
paraules plenes de flors i d'aromes
ens feien pujar al cel, blau d'alegria,
entre grocs, vermells i liles, fantàstiques,
entre els blaus, taronges i blancs olorosos,

paradís de tots els àngels gaudiria
dels colors en eles paraules elàstiques
dels teus versos i poemes formosos

MANUEL MILLÁN CASCALLÓ

 El resto, cielo, tallos, hojas es ardiente colorido vital de primavera, energía que se engarza en los poemas y en las flores caligramáticas

jueves, 17 de febrero de 2011

LOBO

El caligrama representa, en la imagen del animal y en las sombras del nevado paisaje, el poema, mi poema, que presenta al lobo como un animal noble cuya competencia con el hombre desde el principio de los tiempos de su convivencia, le ha conllevado una imagen tan tópica como tergiversada de lo que no era más que un carnívoro que luchaba por su supervivencia y, en ella, la mitificación perversa de un hombre interesado en defender una economía aprovechándose de la Naturaleza, ha convertido poco más que en un monstruo, olvidándose que de él también sacó el perro, su más fiel compañero, su más antiguo y primer animal domesticado, como que muchas de las matanzas de las que se le acusan son el resultado de ataques de perros asilvestrados, antes domésticos, maltratados y abandonados por el hombre.
 
El hombre vertió en él su propia imagen de asesino, porque no hay más asesino verdadero que el que mata por matar y satisfacer necesidades de su ego que poco tienen que ver ni con la supervivencia, ni con el sustento, ni con la urgencia ni del instinto sino directamente con su ambición, su intoleracia hacia lo distinto y hasta por la distracción de matar, como si matar fuera un juego en el que poco o nada valiese el que se juega la vida en el embite.

Así reza el poema que contiene:
Tu reino nemoroso, agreste y fiero,
todas las estaciones se recorre,
te envidia tu rival, preso en su torre...
pagó con libertad ser pendenciero.

Él mata por matar, vender el cuero,
tú, por sobrevivir, tu sombra corre.
En busca del sustento, dejar torre,
en manada o solitario, tu acero,
 
ya marfil, siempre está presto al acecho, 
tu astucia ha de sumarse a todo el miedo
que extiende tu presencia y tu leyenda,

noble Naturaleza que es tu techo,
te sabe de su sangre rey. Remedo
el hombre cazador de tu prebenda

que quiere, con las armas, tu corona
hacer suya y así tu nombre ensucia
y te pinta cual monstruo despiadado.

Mas, al verte, la verdad desmorona
la mentira que a su ambición acucia
y vierte en ti su rostro retratado.

MANUEL MILLÁN CASCALLÓ