Si algo o alguien nos ha cortado las alas voladoras, la esperanza futurible de vida apacible y feliz sin agobios ni dificultades letales, si alguien nos ha cortado las garras predadoras de la ambición, de la posesión de cuanto nos rodea y de nuestra seguridad imperturbable a nivel local, nacional y global es esta pandemia del COVID-19, postergándonos a un confinamiento y abocándonos al miedo de la ruleta rusa,de la fugacidad de la vida y de las posesiones terrenas y de nuestro control del mundo y de cuanto nos rodea. La Naturaleza nos ha enseñado los dientes y nos ha colocado en su sitio. Por eso este caligrama, nos muestra unas tijeras de manicura para cortarnos las alas soñadoras y las garras depredadoras que mostrábamos ilusos.
Tijeras y su sombra se bastan para la imagen simbólica y el poema inscrito en ellas así se funde en el simbólico mensaje:
De nuestra humana civilización
nace la duda voraz...
Corta las garras, las zarpas agudas,
vanidosas,
VARANO VORAZ:
CORONAVIRUS
MANUEL MILLÁN CASCALLÓ
Y con ello, la seguridad desparece y fluye la duda que nos reconcome... Sabemos que son frágiles, fútiles, prescindibles y que nuestro mundo sólido es un inmenso decorado, un Paraíso soñado que bien puede ser una pesadilla, un infierno futurible y nosotros somos espectros vagando en la niebla, intuyendo que hay objetos y seres entre la bruma que siquiera distinguimos con concreción... Monstruos al acecho y nuestros miedos proyectando imágenes evocadas de lo vivido y de lo sentido que tal vez fuera también un sueño inconsistente de vida...
MANUEL MILLÁN CASCALLÓ
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