El poema que la conforma, mi poema, reza así:
PERFORADORA
Nací para cortar,
perforo lunas
en la planicie blanca
del papel,
pozos que se hunden
en su frágil piel...
Luego, grilletes
atarán su sino
en collares de
ausentes aceitunas,
rebanadas del voluble
molino
que a voluntad de
veleta nos gira.
Tozudo soy, mano que
apuñala
pares de heridas como
los pitones,
lo que ha de ser
testimonio en palabras
que dicen de su autor
lo que respira
con la razón y
emoción que lo exhala.
Con la misma energía
que propones
en tal impacto cual el de las cabras,
así hundo yo en tu
carne mis dos astas
y busco las raíces de
la nada
al otro lado de un
muro de versos.
Ni distingo
contenidos, ni castas.
Quien yace ante mí
será perforada,
mordida por mis
caninos perversos
cual después con
grilletes esposado,
carnívora demencia de
mi especie
que de improviso
surge cuando arrecie
la inspiración o el
deber calculado
MANUEL MILLÁN
CASCALLÓ